Rumaan Alam, autor del libro ‘Dejar el mundo atrás’: “Nosotros podíamos aburrirnos de pequeños y no sé si hoy los chavales tienen esa libertad mental”. Esto ha dicho el autor en una entrevista con revista Vogue.
La intriga es lo que sobre vuela tanto en cada párrafo del libro, como en cada escena de la película. No entender que es lo que está ocurriendo es lo más inquietante. Bueno, y no me quiero adelantar al final…
Todo comienza en las vacaciones de Amanda y Clay Sandford, interpretados por Julia Roberts y Ethan Hawke respectivamente en este film dirigido por Sam Esmail, quienes viajan a Long Island junto a sus hijos. Esta familia renta una lujosa propiedad en la cual, en el transcurso de los días irán sucediendo una suerte de eventos inexplicables. Tan inexplicables que llegan a quedarse sin internet producto de un apagón que comienza a generar el caos.
Esta familia pondrá al límite la unión familiar, pero también la conexión que hay entre ellos, después de recibir una visita inesperada en una noche de lluvia y relámpagos. Ese momento cambiara por completo el destino de sus ansiadas vacaciones. Ciertos eventos se transformaran de dulces y tiernas imágenes, en una especie de amenaza, casi advertencia.
Realmente para muchos dará que pensar, y no porque su tema principal, por decir de alguna manera, esté en relación a un apagón del servicio de internet, dejando al mundo desconectado y aislado porque fallan todos los dispositivos. Sino porque creo que puede hacerse otra lectura un poco más surrealista respecto a los efectos que trae esa desconexión, y voy a decir en este caso, en los adolescentes también, tal como Rose, la hija de Amanda y Clay, que estoy segura que nos lo mostrará.
¡Que la disfruten!
